El Instituto Norteamericano del Petróleo (API, por sus siglas en inglés) exhortó al gobierno de los Estados Unidos para que inste a sus contrapartes mexicanas a respetar los compromisos de México, establecidos en el T-MEC, y dar un trato justo a los exportadores estadounidenses, a la vez que prevén una “expropiación indirecta ilegal” en los cambios a la Ley de Hidrocarburos.